viernes, 20 de julio de 2012

Instalación de césped artifical (II)

La elección del césped fué una de esas casualidades que te hacen reflexionar sobre los avatares y circunstancias que te encuentras en el camino de la vida... En Mayo, tras cerca de un mes buscando en Internet distribuidores de césped, contacté con uno en la provincia de Toledo (Decograss), pero no me podían traer la cantidad que yo necesitaba hasta el mes de Julio. Y un día, yendo  a ver el Parque Europa de Torrejón de Ardoz (algún día hablaré sobre la canallada de entrada simulada impuesta por ese ayuntamiento para aparcar), pasamos por delante de un distribuidor/instalador de césped.
Se llaman NICE GARDEN.

Tenían justo el césped que yo quería, y que era idéntico al que encontré en el distribuidor de Toledo, así que no me lo pensé. Antes de continuar quisiera dar dos tirones de orejas: uno a los de Torrejón, por no tener bien posicionada su web, a pesar de lo fantásticamente diseñada que está, y otro a los de Toledo, que con su pésimo sistema de stock poco césped creo que van a vender...


El césped que queríamos debía ser sobre todo, resistente, y muy real. La mayoría de los tipos de césped que se venden tienen el filamento que simula las hojas plano. Esto provoca que se acabe "tumbando" con el tiempo, y haya que "peinarlo", cada cierto tiempo. Pero en los modelos más modernos, las "hojas" (los filamentos), se les conforma de fábrica una forma de media caña. Se consigue así mayor realismo y que no se "tumbe", pues dicha forma le aporta rigidez. Por el contrario, al tacto "pincha" un pelín más que el convencional. El modelo que elegí tiene dos tonalidades de verde, y además, para evitar el tumbado, lleva entre medias de los cogollos de filamentos verdes pequeñas tiras del mismo material pero rizadas, que apenas se ven, pero que lo ayudan a mantener firme.  Además simulan muy bien hojillas secas como el real, pues son bicolores, en marrón oscuro y claro.


Así que con un toro de cargar me subieron en la baca los 40 metros cuadrados (un rollo de 2x20 m) que pesaban como un demonio. Tras llegar a casa, dejarlo caer y llevarlo rodando, se cortó en tiras o alfombras de 2x 5m, con un cutter, extendiéndolas en su futuro emplazamiento.


Ojo al situar las mantas, ya que todas deben ir en el mismo sentido, para mantener una orientación de los filamentos ( hojas ) uniforme. Esto ocurre porque como consecuencia del enrrollamiento de la manta, los filamentos cogen forma hacia un lado. Si las ponemos mal, unos filamentes tenderán a caer hacia un lado y los otros justo al contrario, y se notarán dichas bandas diferenciadas (como un campo de fútbol cuando deliberadamente cortan el césped en bandas en un sentido y luego en otro, para ayudar a los defensas a mantenerse en línea y provocar el fuera de juego).

La primera fiesta la hicimos así con las alfombras extendidas pero sin unirlas entre sí, y aguantaron de maravilla !!!


Así que el siguiente paso era unirlas de tal forma que todo pareciese una superficie uniforme. Para ello se utilizan unas especie de vendas o cinta de unir, que tiene unos 30 cm de ancho y una cola adhesiva especial bicomponente.

Pero antes es precio recortar la solapa que sobresale por uno de los lados de cada alfombra, que viene así de fábrica por la máquina tejedora que necesita dicho reborde para confeccionar la manta de césped.


Cuando hemos eliminado este sobrante, debemos disponer la cinta de unión bajo las alfombras a unir, mitad para una alfombra y mitad para otra. Y lo siguiente es preparar el adhesivo según las instrucciones (básicamente es añadir un catalizador y remover durante un rato). Bueno, antes que el adhesivo mejor prepararnos nosotros, con ropa vieja y unos guantes que nos cubran bien los antebrazos.  


Plegamos las alfombras unos 40 cm y distribuimos el adhesivo con una paleta dentada.



(La mascarilla de sombrero no sirve para nada, os lo puedo asegurar...)



 Por último, se deja secar, poniendo unos sacos de arena encima durante 24 horas. Estos sacos de arena de sílice blanquísima se emplearán al final, distribuyéndola por el césped (un saco de 15-20 kg por cada dos metros cuadrados). Aunque no es necesario, ayudan a mantener el césped erguido y con un ligero riego ayudan a crear una sensación de frescor muy agradable en verano.


En el siguiente artículo veremos la solución a un pequeño inconveniente que surgió una vez pegadas las mantas, y su solución.
Hasta la semana que viene.

4 comentarios:

  1. Saludos, yo me veo en la misma circunstancia que tú, me gusta el modelo Deluxe 40 de la página de Decograss, pero tiene problemas con el suministrador. ¿Podrías decirme el nombre del modelo que compraste a estos de Torrejón? Es que yo tengo que pedirlo por correo, y para saber a tiro hecho cuál pedir, me serviría de gran ayuda tu información. Ya sé que el post tiene un tiempo, pero si me puedes ayudar... Gracias de antemano.

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  2. Hola Paola.
    Pues mira por donde no sé decirte que modelo es el que escogí (no lo apunté). De los cuatro que actualmente ofrecen puedo descartar el primero (Nice Classic), porque no lleva las fibras rizadas entre medias. Quizá sea Nice Desseo o el Confort, porque no necesitan arena de sílice (aunque yo le eché un poco por recomendación de ellos mismos). Creo que el precio rondó los 20 euros/ metro cuadrado.

    Lo mejor es que te pongas en contacto con ellos y quizás por las fotos e información de este blog te puedan asesorar.
    Saludos.

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  3. Rectifico: Acabo de buscar la factura y el modelo que dice y que yo puse es el Nice ROYAL, a 21,40 € más IVA. No sé si está descatalogado. De todas maneras, si les pides unas muestras y que te las envíen por correo, no creo que haya problema.
    Saludos.

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  4. Gracias, a ver si consigo sacarles algo en claro. Un saludo.

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